Volviendo a lo serio, primero el castro Dactonio, de la tribu de
los lemavos, convertido en fortaleza feudal murada en la que convivían, no sin
conflictos, monjes negros y condes. En lo alto se conservan la torre del
homenaje (museo y vistas sobre la Tierra de Lemos), el palacio y el monasterio
de San Vicente del Pino, con soberbio claustro en vías de ser ocupado por un nuevo Parador de Turismo.
La colección de arte sacro de las madres benedictinas,
instalada en el convento sito al lado de la puente viaje sobre el Cabe,
custodia piezas tan valiosas e inesperadas, como un Cristo Yacente de Gregorio
Fernández. La fundadora, esposa del poderoso conde Pedro Fernández de Castro,
se trajo de Roma, como regalo de Urbano VIII, una suntuosa arqueta – joyero.
Para completar el trio de ases, un remedo de El Escorial de
proporciones también colosales: El colegio de Nuestra Señora de la Antigua.
Levantado por el cardenal humanista don Rodrigo de Castro. Dentro podemos
admirar los dos únicos Grecos que le tocaron en suerte a Galicia y también
otras pinturas de Andrea del Sarto. El retablo mayor de Moure, sin decorar ni
pintar, oculta un rico anecdotario.
Como llegar a Monforte de Lemos
Ver mapa más grande
No hay comentarios:
Publicar un comentario